Según los contenidos del taller de la licenciada Cristina Sanchez Vega, Hay momentos en la vida en que ocurre algo que te hace cambiar de punto de vista, de perspectiva, de sentimientos o de emociones. Algo pasa que te abre un sinfín de incógnitas por resolver, llenándote de un sentimiento cálido del cual no sabes muy bien qué esperar o pensar.
De repente empieza la búsqueda del autoconocimiento. Y como por casualidad, o a través de “coincidencias”, que en realidad son causalidades, las cosas se van alineando para llegar a un lugar aparentemente desconocido o poco claro.
¿Te ha pasado alguna vez que por sorpresa te cae un libro en tus manos y da la respuesta que estabas buscando? ¿O que de repente te encuentras con un viejo conocido y te propone la oportunidad que necesitabas? ¿O recibes una llamada telefónica de la persona con la que estabas pensando en aquel preciso momento? Estas son situaciones que normalmente llamamos “coincidencias” o golpes de suerte. Sin embargo, a estos hechos se les puede encontrar un sentido y aprender a sintonizar con el Universo o la Inteligencia Universal. Estas coincidencias son “sincronicidades”, que constituyen mensajes impredecibles que te envía el Universo para dibujarte tu camino.
Cuando te das cuenta de que existe una realidad más allá de tu comprensión lógica y racional, es entonces cuando empiezas a abrirte al arte de vivir con consciencia, a abrir tu visión de vida, a “despertar”. ¿Y qué significa “Vivir con Consciencia”? Se refiere a elegir conscientemente, actuar en vez de reaccionar automáticamente, entre las distintas opciones de que dispones. Para ello, el “Coaching para Despertar” te ayuda a:
1. Expandir tus mapas mentales de quién eres y de lo que es posible para ti.
2. Romper las barreras de tu vieja mentalidad y “salir de la caja” (o zona de comodidad).
3. Abrir nuevas perspectivas y oportunidades en tu vida.
En el momento de “despertar” empiezas a ver que son tus actitudes las que determinan tu destino. Es entonces cuando es importante saber elegir las actitudes que desarrollen todo tu potencial. Poco a poco aprendes a ser tú quién elige libremente en cada momento. Comprendes que puedes ser consciente o inconsciente, pero nadie elige por ti.
